lunes, 3 de marzo de 2008

LA BITÁCORA DEL DIABLO. (...o confesiones de un Antiguo.). EL HABITANTE DEL ESPEJO.


I'm still recovering
Still getting over all the suffering
More known for my anger
Than for any other thing
But you've always tried
To be by my side
And catch my fall when I start to slide

(Martin L. Gore. The Sinner In Me)


Dicen que si miras tu imagen en el espejo fijamente... surgen los rostros de tus vidas pasadas...


Hay un mundo tras el velo... El cristal es sólo una puerta, una barrera invisible que penas separa, pero distancia. Más allá habita esa parte de mí que reconozco, esa parte que me huyó dejándome habitar esta carcasa extraña donde palpita, no sé por cuanto tiempo, este corazón anacrónico y envejecido que alojo en el pecho. No me creen cuando les digo que no soy quien aparece en el espejo, pero miento... quien no soy es quien se halla frente a él. El hombre del espejo no tiene mi rostro, pero soy yo. Qué ironía saberse reflejo, saberse privado de la verdadera identidad. Tras el cristal, en ese mundo de variaciones sutiles, reverso onírico a un tiempo de la realidad, está mi hogar y mis verdaderas facciones, que son muchas. Mis ojos contemplan con claridad el ser que nadie ve... y nos miramos como extraños reconociéndonos, sin poder tocarmos. Añoro su mirada fiera, su armonía grave y eterna y quisiera cruzar el umbral... habitar al otro lado, mirar desde la ventana prohibida y maldita. Privado de mi, condenado a parecer quien no soy, a saberme duplicado en negativo.
Hay un universo refractario, conectado a través de todos los espejos, donde aquellos quienes somos realmente nos observan tras sus cristales sin tiempo. Desde el otro lado nos esperan... desde el otro lado nos llaman en silencio. Siempre he sabido que pertenezco ese lugar más que a éste. A veces me queda la duda de saber, si el reflejo soy yo, si el adulterado, si el ficticio, si la imagen espejada es la que tengo por real y no al contrario. Hay un mundo al otro lado del espejo, de donde vengo, donde quedó mi pasado, donde habitan mis sombras, donde realmente existo.

Dicen que si miras tu imagen en el espejo fijamente... surgen los rostros de tus vidas pasadas.
¡Haz la prueba! Si encuentras valor para ello.